Con el Partido Popular en la Junta de Andalucía, todo sigue igual que antes

No importa quien gobierne en la comunidad andaluza; ahora, el Gobierno del PP, el mejor alumno del PSOE, continúa recortando a los médicos

El tiempo pasa, pero nada parece cambiar. El tiempo pasa y pasan también los gobiernos y las estrategias políticas, pasan los agradecimientos y los aplausos a las ocho de la tarde, pero el maltrato a los facultativos se mantiene.

Un año más, llegamos al verano, una época de descanso para muchos, pero no para los médicos del Hospital Clínico de Málaga. De nuevo vuelven a aparecer los recortes en personal, precisamente en la época en que más falta hace un refuerzo, y de nuevo vuelven a aparecer límites en la asistencia que se presta a los malagueños. Esto se suma al traspaso de la población atendida por el Hospital de Alta Resolución de Benalmádena al área hospitalaria del Hospital Virgen de la Victoria, lo que supone un incremento del 18% de la población atendida por el Hospital Clínico, sin que se hayan asignado los recursos económicos para mantener dicho HARE (algo que es una vergüenza) y ahora lo tienen que sufrir los médicos y los usuarios del Clínico que verán aumentar las listas de espera.

Esta semana hemos sabido que, dentro de la estrategia de recortes del Servicio Andaluz de Salud, se suprimían sin previo aviso, y como mínimo hasta final de año, las denominadas continuidades asistenciales, es decir, las consultas que se llevan a cabo en horario de tarde programadas en la gran mayoría de los casos para reducir listas de espera y agilizar la asistencia hospitalaria a la población, de obligación para los médicos.

Preguntados por ello, los responsables del centro nos trasladaron que dicha reducción se enmarca en una estrategia de ahorro económico, que parte desde la propia Junta de Andalucía, y que ha llevado a la administración a reducir dicha asistencia en los diversos centros de la provincia, con el caso extremo del Hospital Clínico, donde directamente serán suprimidas a partir del próximo día 1 de agosto.

Ante esta situación, el Sindicato Médico de Málaga (SMM) quiere expresar en nombre de los médicos afectados su rechazo más absoluto a esta medida, tanto por la enorme repercusión que tendrá en la calidad y eficacia de la asistencia que se presta, como por el deterioro de las condiciones laborales de los facultativos, que ven cómo una actividad obligatoria desaparece sin ningún tipo de aviso ni justificación. Parece ser que de nada han servido los criterios de eficacia en la reducción de listas de espera, accesibilidad de la población, ni cualquier otro criterio clínico, sino que se debe a la pura necesidad de reducir el gasto económico, lo que nos lleva a una situación de discriminación incluso al compararse con otros centros hospitalarios de la provincia.

Esta acción no ha sido negociada ni con los trabajadores afectados ni con sus representantes sindicales ni por supuesto con la población afectada, lo que nos recuerda a épocas pasadas, no muy lejanas, y que nos prometieron no volver a ver cuando fuimos a votar y decidimos un cambio en el gobierno de nuestra comunidad autónoma, gobierno que no tiene escrúpulos en meter la mano en la cartera de los facultativos, como ya hizo la señora Montero, maestra en recortes asimétricos contra los facultativos, que aún sufrimos en la actualidad.

Pues no, cambian los gobiernos, pero no las políticas; y, mientras tanto, los pacientes, nunca mejor dicho, una vez más, debemos “tener cuidado” en no necesitar una cita en el hospital durante el verano y armarnos de paciencia mientras esperamos que nos llamen para una revisión o intervención en un sistema que ya ha colgado el cartel de ‘cerrado por vacaciones’.

Málaga, 23 de junio de 2023